China vuelve al radar de Ecuador como potencial financista, en momentos en que el mercado internacional de capitales supone una opción demasiado costosa.
El presidente de la República, Lenín Moreno, visitará China del 11 al 15 de diciembre. El punto clave de la agenda será concretar un nuevo crédito con el banco CDB de ese país.
Los recursos servirán para cerrar el financiamiento de este año y se espera abrir nuevas líneas, dijo a este Diario Richard Martínez, titular de Finanzas, el 11 de noviembre. Esa Cartera confirmó que equipos técnicos han visitado estos días China para ultimar los detalles del acuerdo. Diario El Comercio conoció que el préstamo con el CDB bordearía los USD 500 millones.
China se convirtió en una alternativa de financiamiento a partir del 2009, tras la decisión de Ecuador de no pagar una parte de su deuda externa que consideró “ilegítima” lo que supuso el cierre de las puertas del mercado de capitales.
El gigante asiático pasó a ser el principal acreedor del Estado, por encima de otros países y organismos multilaterales. La deuda con China, que era de solo USD 7 millones en el 2007, llegó a sumar 8 144 millones en el 2016; es decir el 31% del total de deuda externa. Desde el 2017, el peso del financiamiento chino empezó a disminuir y en octubre pasado cerró en USD 6 489 millones, es decir, 18% de las obligaciones externas.
Este año el Ecuador no ha recibido nuevos préstamos de esa nación. China ofrece recursos de libre disponibilidad, aunque las tasas son más altas y los plazos más cortos que los de multilaterales. Según datos de Finanzas, entre el 2010 y el 2017 se realizaron 23 operaciones con bancos chinos. De ellas, 12 se contrataron a tasas de interés de entre el 6 y 7,25% y menos de 10 años de plazo. En ese período, entes como el Banco Interamericano de Desarrollo, por ejemplo, otorgaron préstamos para proyectos de inversión específicos al 2% y más de 20 años plazo. El gigante asiático ha atado la entrega de créditos a la venta de crudo y a la participación de firmas chinas como ejecutoras de proyectos de inversión. Ecuador llega a China con tres temas sensibles en agenda.
El primero es la decisión del Gobierno de no recibir la Hidroeléctrica Coca-Codo Sinclair, ejecutada por la china Sinohydro, hasta que cumpla con las observaciones solicitadas por el Gobierno. Un informe de Contraloría señala que esta central registró hasta el 30 de abril pasado 171 defectos no atendidos por Sinohydro. Entre ellos están 7 648 fisuras en los distribuidores de agua, soldaduras de mala calidad y desgaste en los rodetes de las turbinas.
El embajador de China en Ecuador, Wang Yulin, anticipó hace unos días que las fallas no son un problema de calidad y las calificó de “superficiales”. Pero dijo que Sinohydro está dispuesta a asumir sus responsabilidades si se confirman las fallas.
La firma está pendiente de que concluya una auditoría. El Embajador también se refirió a que la empresa Railwy Nº9 Engineering Group quiere “sentarse a la mesa para buscar una salida” al conflicto que mantiene con el Ministerio de Educación. En julio pasado se anunció la terminación unilateral del contrato por incumplir con la construcción de 200 escuelas del Milenio.
Un tercer tema en agenda es la decisión de Ambiente de suspender en mayo el 40% de obras en Mirador, por incumplimientos ambientales. La concesión minera está a cargo de la china Ecuacorriente. Estos inconvenientes pueden ser parte de la discusión entre Ecuador y China, para definir las condiciones del nuevo financiamiento, señaló Walter Spurrier, director de Análisis Semanal.
“Cuán dura será China es un tema que se está analizando”, dijo, aunque señaló que si ve que Ecuador tiene dificultades de pago puede estar dispuesta a refinanciar.
En la visita al país asiático, además, el Gobierno buscará destrabar los temas de restricciones arancelarias para algunos productos ecuatorianos.
Una misión de empresarios acompañará al Jefe de Estado. Entre las actividades estará asistir al Foro de Inversiones Invest Ecuador.
José Antonio Hidalgo, presidente de la Cámara Ecuatoriano-China, refirió a Diario El Comercio, que la visita significará una oportunidad para insistir en la reducción total del arancel que tiene el banano, camarón y rosas. El banano tiene un impuesto del 10%, el camarón se grava con 2% y las rosas con el 10%.
Ecuador promocionará productos como la pitahaya, uva y aguacate. Para ello se pedirá la agilidad en apertura de permisos fitosanitarios. También se insistirá en permisos zoosanitarios para el envío de lácteos.
Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores, dijo que Ecuador tiene interés por vender pitahaya, quinua y vegetales congelados ya procesados. Y se buscará que Ecuador sea la sede de la cumbre chino-latinoamericana para el 2021, dijo Hidalgo. Los empresarios viajarán el 7 de diciembre.