“En el contexto internacional, la Comisión Marítima Federal (FMC) de Estados Unidos ha jugado un papel crucial en la protección de los intereses de importadores, transportistas y otros intermediarios del comercio marítimo”, destacan los abogados Rafael Durán, Socio de Legal Export Abogados y especialista en litigios, derecho marítimo, seguros y comercio internacional y Fernando Olavarría, especialista en el área de Comercio Internacional, Derecho de Transporte, Aduanas y Seguros de Legal Export Abogados.
La FMC- explican- es la agencia federal independiente responsable de regular el sistema de transporte marítimo internacional de Estados Unidos en beneficio de los exportadores, importadores y consumidores estadounidenses. Asimismo, “ha tenido un rol relevante a la hora de regular y supervisar las prácticas comerciales de las líneas navieras, asegurando que los cobros sean justos y transparentes, especialmente en áreas críticas como la facturación incorrecta, demurrage y detención”, destacan los abogados.
Esta regulación- sostienen “ha proporcionado una vía eficiente para la resolución de disputas y la protección de los actores más vulnerables en la cadena logística”.
Situación actual en Chile
Según detallan Durán y Olavarría, en Chile, la situación es distinta, “al no existir una entidad específica como la FMC que se dedique exclusivamente a la regulación y supervisión del comercio marítimo”. Sin embargo, apuntan, existen algunas instancias y mecanismos que pueden abordar, de forma limitada, estas materias:
- Tribunales de Justicia y arbitrajes: Los importadores y transportistas pueden recurrir a los tribunales de justicia para resolver disputas comerciales. Aunque este es un proceso formal y puede ser costoso y prolongado, es una opción disponible para casos graves de cobros injustificados o prácticas desleales.
- Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC): Aunque el SERNAC se enfoca principalmente en la protección de los consumidores, en algunos casos puede intervenir en disputas que involucren servicios prestados a consumidores finales. Sin embargo, su ámbito es limitado en comparación con el de una entidad especializada como la FMC.
- Cámaras de Comercio y Asociaciones Industriales: Estas entidades, como la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), aunque no tienen poder regulador, pueden actuar como mediadores en disputas comerciales y ofrecer foros para la solución de conflictos de manera amistosa.
- Autoridad Marítima Nacional: La Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante (Directemar) regula aspectos de seguridad y operación de la marina mercante, pero su rol en disputas comerciales es limitado y no se extiende a la regulación de tarifas y prácticas comerciales.
Situación en otros países de América Latina
Según los abogados, en otros países de América Latina, la situación es similar a la de Chile. La mayoría carece de una entidad especializada como la FMC. Sin embargo, algunos han tomado ciertas medidas para mejorar la regulación y supervisión del sector marítimo, por ejemplo:
- Brasil: La Agencia Nacional de Transportes Acuáticos (ANTAQ) regula y supervisa las actividades de transporte acuático en Brasil, incluyendo la navegación interior, de cabotaje, y de largo curso, así como la gestión de terminales portuarias públicas y privadas. Una de las funciones que cumple la ANTAQ es sobre la resolución de conflictos, en donde la agencia actúa como mediador entre los usuarios y operadores del sistema de transporte acuático.
- México: La Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE), junto a sus diversas acciones y programas, puede intervenir en casos de prácticas anticompetitivas en el sector marítimo, como también establecer bases de regulación tarifaria por el uso de infraestructura y prestación de servicios portuarios, pero no regula directamente las tarifas y prácticas comerciales de las líneas navieras.
La necesidad de una Comisión Marítima en Chile
“Si bien existen mecanismos en Chile para la resolución de disputas en el sector marítimo, estos son limitados y no ofrecen la misma protección y eficiencia que una entidad especializada como la FMC en Estados Unidos”, sostienen Durán y Olavarría.
Por ellos concuerdan en que “la creación de una comisión marítima en Chile podría proporcionar una solución más adecuada y efectiva, garantizando prácticas comerciales justas y transparentes, mejorar la regulación y supervisión de las prácticas de las líneas navieras, especialmente en aspectos como el demurrage y el detention, ofreciendo una mayor protección a todos los actores del comercio marítimo. Esta medida no solo beneficiaría a importadores y transportistas, sino que también fortalecería la competitividad del sector marítimo chileno en el contexto internacional”.
Fuente: Mundo Marítimo