El sector bananero ecuatoriano continúa sus iniciativas para mejorar las condiciones comerciales en los que el banano llega a sus principales mercados internacionales, en especial a su primer destino, los países de la Unión Europea (UE). A ese destino -de enero a septiembre- se destinó el 26,67 % de las exportaciones totales de la fruta.
Ecuador envió a los países del bloque europeo 62,53 millones de cajas de banano, de las 234,42 millones de cajas exportadas en lo que va del 2022 -cifras a septiembre- a todos los mercados, lo que representa una reducción del 10,76 % en comparación con el mismo periodo del 2021, según la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (AEBE).
En tanto, la responsabilidad compartida y ‘De la Granja a la Mesa’ que está dentro del Pacto Verde Europeo, una iniciativa con la que la UE busca conseguir hasta el 2030 que al menos un 25 % de sus tierras agrícolas se dediquen a la agricultura ecológica y que además sus proveedores también cumplan estos requisitos; estuvieron entre los temas abordados durante la visita al Ecuador de Paolo Garzotti, jefe de la Unidad de Comercio para América Latina en la Comisión Europea.
La visita del delegado obedeció a los procesos de revisión de los avances del acuerdo comercial multipartes que se realiza de manera continua, que este año cumplió cinco años desde que entró en vigencia en enero del 2017.
Según el director ejecutivo de AEBE, José Antonio Hidalgo, con Garzotti se conversó sobre el compromiso y esfuerzo del sector bananero ecuatoriano en torno a la sostenibilidad, además sobre el gran desafío de la industria de que este esfuerzo sea reconocido con el objetivo de una Responsabilidad Compartida en el mercado.
En este orden, uno de los puntos principales expuestos al delegado europeo, reveló Hidalgo, tuvo que ver sobre la disminución de los límites máximos de resíduos de ciertas moléculas en las plantaciones, que tiene como plazo el 2030.
“Lo hacen en base a un calendario político, lo que estamos diciendo es que tienen que ir al ritmo del desarrollo de otras moléculas que reemplacen de manera efectiva en campo y en costos para que el impacto, que en diferentes latitudes y necesidades en torno también a un gran objetivo que es la seguridad alimentaria, (no) afecte la sostenibilidad económica”, explicó el titular de AEBE, quien advirtió que no contar con el uso de una molécula para la protección de las plantaciones los expone a mayores afectaciones fitosanitarias (mayores mermas), por lo que indicó que esto tiene que ser compensado por los compradores en el nombre de los objetivos sostenibles y del Pacto Verde.
“Eso no está siendo compensado por parte de los supermercados y tampoco está siendo redistribuido en las certificaciones que se exigen”, lamentó Hidalgo, quien aseguró que se busca que en las discusiones de la Ley de Diligencia de Vida que ya se aplica en Alemania a partir del 2023 y que se discute actualmente en el Parlamento Europeo se incluya la responsabilidad compartida, que los esfuerzos sean repartidos en toda la cadena.
No obstante, Hidalgo agregó que durante la reunión con el delegado también se abordaron aspectos positivos de la relación comercial con el bloque, como por ejemplo las ventajas que el tratado comercial con la UE ha significado para Ecuador.
“El tratado comercial para nosotros ha sido una gran ventaja, igualara una parte arancelaria con al competencia que tenemos a nivel latinoamericano ha sido una ventaja tremenda para nosotros”, sostuvo el dirigente, quien sin embargo aclaró que la meta es entrar a Europa con arancel cero y dejar de pagar los 75 euros por tonelada métrica.
Otro aspecto positivo que se resaltó es la permanencia de Ecuador como el principal proveedor de banano del bloque.
En tanto, sobre los pedidos realizados al delegado, Hidalgo señaló que “va de vuelta a Bruselas a hacer el planteamiento que tenga que hacer y nosotros tenemos que revisar el seguimiento de nuestro posicionamiento”. (I)
Fuente: Diario EL UNIVERSO