Redacción CAMAE
Las torrenciales lluvias y fuertes vientos que azotan la costa de Luisiana, a causa del huracán Ida, han llevado al puerto de Nueva Orleans a detener la actividad de su terminal de contenedores.
A partir de este lunes, las tareas de cargar y descargar quedarán suspendidas; decisión que ha sido replicada por otras empresas involucradas en el fraccionamiento o el traslado de carga a barcos más pequeños, que dejarán de trabajar el mismo día.
El domingo, el huracán Ida azotó la costa de Luisiana con vientos más poderosos que el huracán Katrina, y una marejada ciclónica «catastrófica» que dejó a Nueva Orleans sin electricidad, enfrentando inundaciones y destrucciones masivas.
Al momento, las embarcaciones se están desviando del río Mississippi para evitar la ira del huracán Ida. La Guardia Costera de Estados Unidos, por su parte, decidió cerrar el tramo inferior de uno de los ríos más largos del mundo, lo que llevó a la autoridad portuaria de Nueva Orleans a reprogramar las llegadas de barcos.
El suministro de gasolina y gas natural en EEUU también permanece incierto, debido a que la tormenta cerró el 91 % de la producción de crudo y el 85 % de la producción de gas natural en el Golfo de México.
Fuente: Bloomberg
