“En 2023, se entregaron 2,3 millones de TEUs de capacidad en el sector portacontenedores, superando el anterior máximo histórico en un 37%. En lo que va del año se ha establecido otro récord, ya que se han entregado más de 1 millón de TEUs durante los primeros cuatro meses del año, un aumento de casi el 80% en comparación con el récord anterior”, afirma Niels Rasmussen, analista jefe de transporte marítimo de BIMCO.
Como hasta ahora el desguace de buques sólo ha retirado 19 naves pequeñas, la flota se ha ampliado en casi 1 millón de TEUs, un aumento del 3,5% en comparación con principios de año. Esto se suma al crecimiento de la flota del año pasado del 8,2%.
“Debido a las entregas récord, el listado en el libro de órdenes ha disminuido. Sin embargo, como se ha ordenado la construcción de 1,8 millones de TEUs de capacidad durante 2023 y 2024, solo ha disminuido en 1 millón de TEUs y ahora se sitúa en 6,1 millones de TEUs, el 21% del tamaño de la flota actual. Como resultado, la participación del libro de órdenes en la flota es más del doble que antes de la pandemia de COVID y que comenzara la ola de órdenes de construcción de las líneas navieras”, dice Rasmussen.
El libro de órdenes de construcción de capacidad contiene 2 millones de TEUs a ser entregados en 2024 y se espera que los volúmenes de entrega para el año superen los 3 millones de TEUs, un 30% más que el récord del año pasado.
En 2025, las entregas deberían finalizar justo por debajo de los 2 millones de TEUs, el tercer mayor volumen de entregas en un año sólo superado por 2023 y 2024.
A pesar de esto, las entregas todavía están lejos de los récords en relación con el tamaño de la flota. En 2024, se espera que las entregas alcancen el 11% de la capacidad de la flota a principios de año. Esta cifra se superó por última vez en 2008, cuando las entregas representaron el 14% de la flota.
Se esperaba que las entregas récord de buques crearan un exceso de oferta significativo en el mercado y, si bien esto afectó al mercado en 2023, parece que las entregas de este año contribuyen a mantener el comercio mundial de contenedores en movimiento.
Debido al desvío de la ruta de los buques a través del Cabo de Buena Esperanza tras los ataques de los hutíes en el Mar Rojo, se necesita alrededor de un 10% más de capacidad para gestionar el comercio mundial de contenedores. A ese 10% se le debe sumar la capacidad necesaria para gestionar cualquier crecimiento del mercado.
“Cuando los buques comiencen a retomar sus itinerarios a través del Mar Rojo y el Canal de Suez, lo más probable es que observemos un exceso de oferta significativo. Entre 2019 y 2023, la flota creció un 21% mientras que el volumen de contenedores movilizados solo creció un 4%. Entre 2023 y 2025, se espera que la flota crezca otro 15%”, afirma Rasmussen.
Fuente: Mundo Marítimo
