La capacidad de adaptarse a cada escenario que se surge como una necesidad en un entorno en constante cambio como es el que enmarca a la industria marítima y logística. Así lo destaca Josué Alzamora, director regional de excelencia en ventas para América Latina de Maersk.
«La adaptabilidad se ha vuelto cada vez más crucial a través de diferentes etapas de mi carrera, y la verdad es que la gran importancia de la misma es algo de lo que no era completamente consciente en mis primeras etapas», comentó Alzamora.
Entre los beneficios de la adaptabilidad, Alzamora destacó la oportunidad de relacionarse personalmente con una gran cantidad de personas, lo que a su vez habría aportado a su calidad como profesional, al estar expuesto a muchos antecedentes empresariales y culturales distintos entre sí.
Un enfoque claro
Alzamora insiste en que la adaptabilidad y la disciplina van mano a mano, comentando al respecto que la gestión eficiente del tiempo es crucial tanto a nivel personal como en el ámbito laboral. Desde las tareas más simples de la rutina diaria hasta los imprevistos que puedan surgir en la logística, es fundamental mantener una agenda organizada. Sin embargo, es importante reconocer que pueden surgir situaciones urgentes que requieran atención inmediata y que podrían alterar los planes establecidos. En este sentido, sería necesario adoptar un enfoque estratégico para evitar caer en un ciclo constante de resolución de problemas, donde las prioridades reales se pierden.
Para que eso no pase, es fundamental realizar revisiones periódicas tanto a nivel personal como en equipo para ajustar nuestras prioridades según sea necesario.
“El equilibrio consiste en asegurarnos de que nos ocupamos del hoy sin descuidar las acciones que construyen una base más sólida para los objetivos a más largo plazo”, enfatizó el ejecutivo.
Calma y trabajo en equipo
Durante su carrera, Alzamora ha enfrentado diversas perturbaciones a gran escala, desde el atentado a las Torres Gemelas en 2001 hasta la pandemia mundial y los bloqueos del Canal de Suez. Estas experiencias proporcionarían lecciones sobre la importancia de la preparación empresarial y la capacidad para mantener la calma y tomar decisiones rápidas en situaciones críticas. También destacó la necesidad de contar con planes de continuidad bien definidos que vayan más allá de las operaciones habituales, así como la importancia de la adaptabilidad y la fortaleza mental en momentos de crisis. De igual manera, Alzamora subrayó la importancia de contar con un equipo de calidad.
“El trabajo en equipo también es absolutamente esencial en cualquier contingencia y, dependiendo de la situación, puede ser necesario dividir a los miembros en flujos de trabajo para abordar áreas específicas de la situación”, concluyó.
Fuente: Mundo Marítimo
