Tras un año -2021- en el que las exportaciones no petroleras ecuatorianas a Costa Rica descendieron 32,1 % al generar $ 21,2 millones, $ 10 millones menos respecto del 2020, en lo que va del 2022 los envíos a ese destino, con el que Ecuador inició este 8 de agosto la primera ronda de negociación para un acuerdo comercial, muestran recuperación.
Según cifras del Banco Central del Ecuador (BCE), en el primer quinquemestre de este año -de enero a mayo- las exportaciones no petroleras, con un monto de $ 11,2 millones, crecieron en $ 2,9 millones en comparación con el mismo periodo del 2021, año en el que fue el decimoquinto destino de las exportaciones no petroleras ecuatorianas a América Latina y el Caribe, y de las exportaciones agrícolas y pesqueras.
Los principales productos de exportación fueron enlatados de pescado; manufacturas de metales; pescado; banano; productos químicos y farmacéuticos; productos pecuarios; manufacturas de papel y cartón; vehículos y partes; manufacturas de fibras textiles; y, atún. De enero a febrero del 2022, la base del Servicio Nacional de Aduanas del Ecuador (Senae) registró a 38 empresas ecuatorianas exportadoras de productos no petroleros cuyo destino final es Costa Rica.
En cuanto a las importaciones desde Costa Rica se ha mantenido una tendencia de crecimiento.
En el 2021 cerraron con un saldo de $ 58,7 millones con un crecimiento del 45,3 % respecto del 2020, esto es, $ 18,3 millones más. Mientras que de enero a mayo pasado crecieron en 41,4 %, al registrar un monto de $ 31,0 millones, $ 9,1 millones más en comparación con el 2021.
Entre los principales productos importados desde Costa Rica constan medicinas; desperdicios y desechos de metales; neumáticos; insecticidas; desinfectantes y productos similares; interruptores, demás conectores y sus partes; plantas frescas; instrumentos y aparatos de medicina; preparaciones alimenticias; manufacturas de metales; artículos y aparatos de ortopedia, fajas y vendajes.
Mientras, las negociaciones comerciales entre los equipos de ambas naciones se desarrollan en formato virtual y se extenderán a lo largo de esta semana.
Esta primera ronda se da tras el anuncio de los presidentes Guillermo Lasso y Rodrigo Chaves, el pasado 9 de junio, en el marco de la IX Cumbre de las Américas, bajo la voluntad de ambos países de iniciar negociaciones.
Se trata de un acuerdo de última generación en el que se negociarán 18 disciplinas: acceso a mercados para mercancías; reglas de origen y procedimientos aduaneros; facilitación del comercio; obstáculos técnicos al comercio y congruencia regulatoria; medidas sanitarias y fitosanitarias; defensa comercial; política de competencia; comercio de servicios; comercio electrónico; entrada temporal de personas de negocios; propiedad intelectual; contratación pública; comercio e inclusión de género; comercio y temas laborales; comercio y medioambiente; fortalecimiento de capacidades comerciales para mipymes, entre otras.
Antes del proceso se realizó un estudio de factibilidad en 2017, gracias al cual Ecuador y Costa Rica evaluaron la posibilidad de negociar un acuerdo comercial. En abril de 2019, el Comité de Comercio Exterior aprobó el inicio de negociaciones entre las partes y se acordó el marco general de la negociación incluyendo a este país como prioridad en su agenda comercial, y entre 2021 y 2022 se retomaron las reuniones de jefes negociadores y coordinadores del acuerdo, con el objetivo de modernizar el marco general de la negociación y fortalecer la relación bilateral.
Inversión extranjera directa
Durante los últimos seis años el promedio de inversión extranjera directa (IED) en el Ecuador desde Costa Rica alcanzó un monto de $ 26,1 millones; siendo el 2021 el año de mayor flujo con $ 85,1 millones, según cifras reveladas por el Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca.
En el primer trimestre de 2022, la IED desde Costa Rica fue de $ 6 millones que corresponden principalmente al sector industria manufacturera con $ 83,8 millones, que representan el 98,6 % del total de la IED desde el país tico. En segundo lugar está el sector de construcción; seguido de transporte, almacenamiento y telecomunicaciones y finalmente los servicios comunales, sociales y personales.
Fuente: Diario EL UNIVERSO