Después de un año desafiante en 2023, donde las inclemencias climáticas llevaron a Ecuador a importar arroz para satisfacer la demanda interna, el país busca consolidarse nuevamente como un importante exportador de este cereal. La Corporación de Industriales Arroceros del Ecuador, Corpcom, anunció el reinicio de las exportaciones hacia Colombia, con una proyección de enviar alrededor de 50.000 toneladas durante el presente año.El 2023 fue un año complicado para nuestra industria arrocera debido a las excesivas lluvias que afectaron la cosecha del primer semestre. Sin embargo, a pesar de las proyecciones de un posible fenómeno de El Niño, las zonas arroceras no sufrieron mayores impactos, lo que nos ha permitido retomar nuestras exportaciones este año«, destacó Juan Pablo Zúñiga, presidente de Corpcom.
Ecuador, que lleva aproximadamente tres décadas exportando arroz al mercado colombiano, comenzó a enviar este cereal a principios de abril de este año, buscando la recuperación del sector arrocero nacional.
Con una producción anual de arroz pilado estimada en 877.800 toneladas y un consumo interno de 780.000 toneladas, lo que equivale a 43 kilos por persona al año, el país cuenta con un excedente exportable de 97.800 toneladas, según datos de @Produccion_Ecu.
Además de la reactivación de las exportaciones a Colombia, Ecuador tiene planes para expandir su presencia en otros mercados internacionales.
«Estamos trabajando en establecer contactos con importadores en varios países de Centroamérica, así como explorando oportunidades para arroces con valor agregado en Europa y en naciones del Medio Oriente«, afirmó Zúñiga.
Uno de los pilares fundamentales para el crecimiento sostenible de la industria arrocera ecuatoriana es el reciente lanzamiento de un clúster arrocero, cuyo objetivo es aumentar la producción por hectárea a 7 toneladas y generar $240 millones adicionales en exportaciones.
«El incremento de productividad es un desafío que requerirá un esfuerzo conjunto del sector público y privado, así como la colaboración de productores, piladores, desarrolladores de semillas y la academia. Estamos comprometidos a trabajar en este objetivo a mediano y largo plazo para asegurar la sustentabilidad de nuestra cadena productiva», concluyó Zúñiga.
Fuente: Diario EL PRODUCTOR