Las diferentes industrias van de a poco recobrando la normalidad tras el impacto del COVID-19, una de ellas es la automotriz. En la región se anuncian nuevas inversiones.
Por ejemplo, Neohyundai México, subsidiaria de Neohyundai Ecuador, inició el ensamblaje de la van H350 en su planta ubicada de Querétaro, con una inversión total de $7 millones.
Por su parte, la japonesa Nissan, como parte del proceso de expansión de la marca en la región, anunció una nueva inversión de $130 millones destinada a renovar la oferta de vehículos pick-up producidos actualmente en Argentina.
¿Pero qué sucede en Ecuador con este sector de la industria?
En el país operan tres plantas ensambladoras, menciona David Molina, presidente ejecutivo de la Cámara de la Industria Automotriz del Ecuador (Cinae).
General Motors ensambla vehículos de la marca Chevrolet, Ciauto ensambla la marca Great Wall, el Haval M4 y la furgoneta Shineray; y Aymesa hace lo propio con la marca Kia.
“Hay otras dos ensambladoras que arman el JAC y la Volkswagen Amarok; y una tercera que es Neohyundai y el Grand I10, esas son tres ensambladoras que no tienen plantas, entonces lo que hacen es contratar y utilizar las instalaciones de Aymesa para fabricar sus vehículos”, explica Molina, quien lamenta que la industria automotriz en el país esté atravesando quizá la peor crisis de los últimos 20 años.
Según cifras de la Cinae, en 2017 y 2018 se produjeron 43 239 y 39 991 unidades, respectivamente, en toda la industria, ya en el 2019 la producción se redujo a 23 704 unidades; y este año, según Molina, por la crisis del coronavirus se espera una producción cercana a las 12 000 unidades.
Hasta agosto se han producido tan solo 5750 vehículos.
El efecto también se siente en la participación de mercado de la industria que hoy representa solo el 18 % del mercado, cuando en los años anteriores esta participación superaba el 30 % y alcanzaba el 40 %. Aunque, el impacto es para todo el sector, incluidos los vehículos importados.
En 2019 el sector en total, entre importados y ensamblados, vendió 131 642 unidades, 4180 menos que las que salieron en 2018; y se espera que para este año las ventas no sobrepasen las 75 000 unidades. Hasta agosto se vendieron 46 727 vehículos, de ellos 39 194 importados y solo 7533 ensamblados.
Sin embargo, pese a los números en rojo, Molina destaca que las plantas han hecho un esfuerzo importante por restaurar su nivel de producción y de alguna manera cristalizar los proyectos nuevos que están en carpeta para su inicio y que sufrieron retrasos por efectos de la pandemia.
En el caso de Kia, reveló que tiene dos proyectos aprobados por la marca, el más próximo es el Soluto, un sedán que iniciará su producción en noviembre próximo. Mientras que otros dos modelos SUV lo harían en el transcurso del primer semestre del 2021.
Esto es confirmado por Ricardo Rosales, director general de Kia Ecuador, quien recordó que la marca ha invertido en los últimos tres años más de $100 millones en infraestructura e inventarios en el país.
“Venimos desde el 2020 liderando el mercado de vehículos livianos en Ecuador, Kia es la marca más vendida, sin embargo, es importante también generar industria, hacer inversiones y es por eso que continuamos, es una inversión adicional de $20 millones entre los tres proyectos”, revela el directivo de Kia.
Proyecta que entre el Soluto y los otros dos son SUV que serán lanzados mundialmente por la marca en el 2021, van a sumar entre 15 000 y 20 000 unidades para vender en el mercado nacional. En agosto el vehículo más vendido fue el Kia Sportage que se ensambla en Aymesa con 365 unidades.
En tanto, Pietro Pilo, gerente de Ciauto, revela que prevén lanzar un nuevo modelo en el tercer trimestre de este año y otros dos modelos más en carpeta para el 2021, e indica que la inversión total para lanzar un modelo al mercado está en alrededor de $3 millones.
Pilo resalta la decisión de los accionistas de reinvertir las utilidades del año pasado para poder seguir operando. «En el contexto de COVID-19 en el que nos encontramos, en el que muchas empresas han cerrado y una cantidad enorme de puestos de trabajo se han perdido, el poder seguir operando es ya un logro del que debemos estar agradecidos y también comprometidos a cuidar», expresa el gerente de Ciauto.
Mientras, en el caso de General Motors, trabajan en una estrategia corporativa para definir los nuevos proyectos regionales y cuáles de esos proyectos van a implementarse en Ecuador.
“Todavía no hay una definición específica de un proyecto nuevo que se vaya a lanzar, pero la información que tenemos de los ejecutivos es que ahora mismo están haciendo las corridas financieras para ya poder anunciar un proyecto nuevo o una estrategia específica para los próximos años”, revela Molina, quien agrega que Neohyundai explora nuevos desarrollos al igual que JAC.
Un dato no menor es que todos los proyectos nuevos que se han anunciado, los de Kia y los que podrían venir de Ciauto, de General Motors y las otras compañías llegarán ya con el 0 % de arancel en los materiales CKD, debido a la Resolución 025 2018 del Comité de Comercio Exterior (Comex), que eliminó estas cargas para los nuevos proyectos desde el 1 de enero de 2019, aunque ya existen proyectos con ese beneficio en el mercado.
Se trata de la camioneta D-Max, la última de General Motor que fue calificada el año pasado como proyecto nuevo, al igual que el Hyundai Grand i10 de Neohyundai y la camioneta Great Wall Wingle 7 de Ciauto.
Molina asegura que se discute con el Gobierno la posibilidad de que los proyectos anteriores también accedan al beneficio, pues calcula que la carga tributaria, entre aranceles para CKD, impuesto a la salida de divisas (ISD) y otros tributos generan un sobrecosto de cerca de $1900 por vehículo.
Fuente: ElUniverso
