El coronavirus o SARS-CoV-2 ha despertado la alerta del mundo entero, pero no solo eso. Científicos de todas las disciplinas se han puesto manos a la obra en busca de soluciones para controlar la pandemia. La Inteligencia Artificial, por ejemplo, es un campo que ha estado muy activo al respecto.
Prueba de ello es la aplicación web DeteCCovid. desarollado por investigadores del Instituto Valenciano de Inteligencia Artificial (VRAIN, por sus siglas en inglés) de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), este desarrollo puede rastrear dispositivos móviles para ayudar a detectar a las personas que han estado próximas a un usuario contagiado con COVID-19.
Los desarrolladores aseguran que la app se basa en un procedimiento completamente anónimo y seguro para los ususarios.
La herramienta también clasifica el riesgo de contagio (muy alto, alto, etc.), en función de lo cerca que haya estado la persona y del tiempo de contacto. Se trata, señala la UPV, de un desarrollo digital que se encuentra aún a escala de laboratorio. Asimismo, indica que los investigadores ponen a disposición de las autoridades sanitarias para la gestión de la pandemia de coronavirus.
Vicent Botti, director del Instituto VRAIN, explica el problema que DeteCCovid busca solucionar: «Los expertos en salud pública afirman que ponerse en contacto con personas que pueden haber estado expuestas a un caso conocido de COVID-19 es uno de los pasos más importantes para contener futuros brotes. Pero el cómo hacerlo es complicado».
Es ahí donde el rastreo de contactos de los teléfonos móviles es una posible solución para poder realizar una detección precoz de posibles contagios. «Y a ello pretende contribuir DeteCCovid», destaca Botti.
El algoritmo de DeteCCovid emplea series de datos proporcionados desde diversas fuentes: de forma colaborativa y anónima mediante GPS en una app que los ciudadanos voluntarios pueden instalar en su móvil, y a través de datos, también anónimos, proporcionados por operadoras de telefonía móvil.
«Estas series de datos, consistentes en parejas de coordenadas+instante de tiempo, son almacenados un máximo de 21 días, tiempo suficiente para evitar el riesgo de contagio«, explica Javier Palanca, otro de los investigadores del Instituto VRAIN implicados en el proyecto DetecCCovid.
Estos expertos explican que la app del usuario enviaría cada minuto, de forma segura, su posición a una nube de datos de la autoridad sanitaria. Y, así, cuando los responsables sanitarios diagnosticaran un positivo en COVID-19, lo notificaría en DeteCCovid y obtendría, como resultado, los identificadores anónimos de las personas que hayan compartido espacio en un mismo intervalo temporal.
Para ello, según según Palanca, DeteCCovid utiliza una proyección tridimensional (espacio, tiempo) y etiqueta a cada identificador anónimo con un riesgo de contagio a partir de la información del lugar donde se produjo y el intervalo de tiempo (día, hora, minutos) en que se dio.
«La clasificación de un ciudadano como contagiado dependerá única y exclusivamente de la autoridad sanitaria, que sería también la responsable de contactar, cuando resulte adecuado, con las personas en riesgo de contagio y adoptar las estrategias de confinamiento o tests apropiadas para ellas«, apunta Botti.
DeteCCovid ya ha sido testeado para otras aplicaciones, con más de 2.000 millones de tuits geolocalizados durante los últimos cinco años.
¿Por qué los pacientes con Covid-19 deben fortalecer la musculatura?
«Al no tener acceso a datos reales –esto será posible cuando la aplicación estuviera distribuida a la población– hemos empleado esos tuits como alternativa para la validación. Los tuits representan datos reales de personas reales con localizaciones reales y, por tanto, permiten inferir el funcionamiento con datos más masivos como serían los de las apps o las teleoperadoras”, indica Botti.
Por ello, «una vez validada, ponemos DeteCCovid a disposición de las autoridades sanitarias, con el objetivo de contribuir al control y gestión de esta pandemia», concluye. ¿Una herramienta más contra el coronavirus? Así parece.
Fuente: Diario Expreso