La logística de contenedores de Estados Unidos se enfrenta a un desafío sin precedentes debido a una sequía histórica en el Canal de Panamá. Este canal, que conecta los océanos Pacífico y Atlántico, es una arteria vital para el comercio estadounidense, movilizando un sorprendente 73% de la carga de exportación e importación del país.
La sequía ha obligado a limitaciones operativas en el canal, incluyendo una reducción temporal en el número de reserva de tránsitos. Esto ha llevado a un aumento del 40% en los tiempos de espera de los buques en el canal.
Las líneas navieras están recalibrando sus operaciones para sortear estos desafíos. Algunas están explorando rutas alternativas o reduciendo las cargas de carga, lo que ha impactado la eficiencia operativa y los costos.
Los expertos predicen que la situación actual podría ser sólo la punta del iceberg. Con el aumento de la frecuencia de los patrones de sequía impulsados por El Niño, la capacidad del Canal de Panamá para garantizar tránsitos fluidos para buques de gran tamaño está cada vez más en duda.
Fuente: LogisNews