El mercado de valores del país es una opción al momento de invertir el dinero, a propósito de que el 15 de abril próximo fenece el plazo para el pago de las utilidades a los trabajadores bajo relación de dependencia, monto correspondiente a las ganancias del 2022.
Los trabajadores destinan parte de este dinero al pago de deudas pendientes, compras para el hogar o inversiones.
Es un dinero extra que puede ser invertido en las bolsas de valores, en las que se pueden obtener ganancias en un periodo menor a un año.
Al 12 de abril del 2023 el monto negociado en la bolsa de valores de Guayaquil suma los 1.737,5 millones de dólares. De ese total, 1.713,6 millones de dólares corresponde a títulos que dejan una renta fija y 23,8 millones de dólares son los de renta variable (compra de acciones).
Esto implicó un total de 3.479 transacciones realizadas.
Al mismo día de abril del 2022, el monto negociado ya llegaba a los 2.056,7 millones de dólares.
Las compañías tienen la obligación de repartir el 15 % de las ganancias netas generadas en el último año a sus colaboradores. Del monto total, 10 % será distribuido en forma equitativa entre todos los empleados y el 5% restante a los trabajadores con cargas familiares (cónyuges o convivientes en unión de hecho, hijos menores de 18 años e hijos con discapacidad de cualquier edad).
La Bolsa de Valores Guayaquil (BVG) preparó una guía con pautas para manejar adecuadamente estos recursos si se decide invertirlos.
“Indistintamente del monto que reciba el trabajador, el pago de las utilidades es una excelente oportunidad para invertir en el mercado de valores y recibir ganancias a futuro”, señala Ricardo Rivadeneira, presidente de la BVG.
En el mercado de valores hay varias opciones para invertir ese dinero extra.
El mercado bursátil es, como su nombre lo indica, un espacio donde se compran y venden activos financieros. A él acuden los agentes económicos, desde empresas, bancos privados y grupos hasta entidades estatales en busca de financiamiento.
La BVG define al mercado bursátil como “un segmento del mercado financiero que permite la movilización de recursos desde los ahorristas o inversionistas hacia las actividades productivas que desarrollan las empresas mediante la compraventa de títulos valores emitidos por las propias empresas”.
Las personas naturales invierten su dinero, en este caso el de las utilidades y con el que se financian las actividades de los agentes económicos, a cambio de beneficios.
No hay un monto mínimo base para la compra de las acciones, pero la inversión sí tiene que ser mayor al cobro de las comisiones que realizan las casas y las dos bolsas de valores del Ecuador.
Los títulos de renta fija son los más negociados en las bolsas del país. Se denominan así porque, como su nombre lo indica, “son títulos valores de renta fija emitidos por emisores legalmente facultados, que reconocen o crean una deuda a su cargo con base en los ingresos futuros que esperan recibir”.
La finalidad de su emisión es financiar sus actividades productivas, como el capital de trabajo, la reestructuración de pasivos, una expansión o nuevos proyectos.
Solo entre enero y febrero de 2023 se inscribieron en la BVG catorce títulos por un monto de 92,5 millones de dólares, de los cuales, el 61 % correspondió a empresas grandes y 39 % a medianas.
En Ecuador hay dos bolsas de valores, la de Quito y Guayaquil.
El mercado de valores nacional cerró con un total negociado de 13.452 millones de dólares durante el 2022.
Los certificados de inversión y depósitos a plazo son los títulos que más se comercializaron el año pasado. De los 6.538 millones de dólares, monto negociado que reporta la BVG en 2022, el 31,7% corresponde a certificados de inversión y 25,8 % a depósitos a plazo.
Las empresas privadas aumentaron su participación en el mercado de valores en 2022, principalmente por la emisión de títulos del sector financiero.
En el 2021 este sector negoció títulos que sumaron 5.754 millones de dólares, un 36,6 % del total, mientras que el 2022 la cifra ascendió a 6.586 millones de dólares y la participación pasó al 51 %.
La colocación de dinero negociado por parte del sector privado creció 19,2 % del 2021 al 2022.
Rivadeneira indica que “siempre es una gran satisfacción que empresas grandes, medianas y pequeñas apuesten y tomen la decisión de incursionar en el mercado de valores. Son decisiones que permiten que las compañías crezcan y contribuyan a la economía nacional”.
Cinco razones y opciones para invertir en las bolsas de valores
1.- La primera es que se consiguen beneficios a un riesgo menor. “En el mercado de valores entran en contacto directo los inversionistas (personas con recursos disponibles para comprar un título) y emisores (empresas que ofertan un título para obtener recursos). Al ser el contacto directo, ambas partes se benefician. En el caso del inversionista, con tasas más convenientes”, indica la guía de la BVG.
2. Beneficios a corto plazo. Como las utilidades son montos anuales, lo recomendable es invertir en títulos de corto plazo (menos de un año). De esta manera, en un plazo menor a un año el inversionista volverá a tener su dinero más una ganancia.
3. Hay dos opciones. Los títulos a corto plazo en que se puede invertir son los papeles comerciales y facturas comerciales. Los primeros son títulos que las empresas emiten para financiar capital de trabajo, en la práctica es reconocer una deuda a favor del inversionista que pagará en menos de un año más intereses. Las segundas son facturas que ingresan al mercado de valores y el inversionista obtiene posteriormente el capital más un retorno atractivo.
4. Hay que definir un porcentaje para invertir. Lo recomendable es separar por lo menos el 10 % de las utilidades para invertir en el mercado de valores.
5. Seguir con la acción de invertir. “Al comprar títulos de corto plazo, se obtendrán ganancias en menos de un año. Es recomendable que se continúe adquiriendo títulos en los próximos pagos de utilidades con la experiencia que se tuvo”, indica la entidad. (I)
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Fuente: Diario El Universo
