Por: Redacción CAMAE
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Un estudio liderado por el Puerto de Los Ángeles de Estados Unidos revela algunas advertencias graves en medio de la guerra comercial que este país mantiene con China.
El informe, «By the Numbers: poniendo en peligro los beneficios nacionales del comercio a través del complejo portuario más activo de Estados Unidos», se publicó el martes 12 de noviembre y concluyó que las tarifas vigentes para los envíos amenazan casi 1.5 millones de empleos en los EE. UU. y más de USD 186 mil millones de actividad económica en todo el país, consignó Dayli Breeze.
La firma de consultoría económica independiente llamada BST Associates realizó el estudio para el puerto.
«Ahora estamos llegando a un precipicio de lo que han hecho estas tarifas y el impacto que han tenido en el Puerto de Los Ángeles», dijo el Director Ejecutivo del Puerto de Los Ángeles, Gene Seroka.
«Creo que Estados Unidos necesita conocer el impacto de los aranceles en nuestra economía», dijo.
Seroka se unió a Jonathan Gold, portavoz de los estadounidenses para el libre comercio; Angela Hofmann, co-directora ejecutiva de Farmers for Free Trade; y Rufus Yerxa, presidente del Consejo Nacional de Comercio Exterior.
«Cada comunidad urbana, suburbana y rural de nuestra nación se beneficia de las importaciones y exportaciones que se mueven a través de los puertos de la Bahía de San Pedro. Las tarifas vigentes están poniendo en riesgo esos beneficios», dijo Seroka.
Durante su campaña de 2016, el presidente Donald Trump prometió «nivelar el campo de juego» entre los Estados Unidos y sus socios comerciales claves. El presidente afirmó que los aranceles punitivos obligarán a China a abrir sus mercados a los productos estadounidenses y ayudarán a combatir el robo internacional de la propiedad intelectual estadounidense.
«China está siendo asesinada», declaró Trump el mes pasado. «Los aranceles están matando a China».
Sin embargo, la publicación del informe de puertos del martes se produjo inmediatamente después de las últimas estadísticas que muestran la caída del flujo de carga en el puerto más grande del país norteamericano.
Los funcionarios portuarios atribuyeron una disminución del 19.1% en el movimiento de carga para octubre de 2019 a la guerra comercial en curso.
En octubre de 2018, los importadores ya anticipaban los aranceles y redoblaron sus pedidos para mover la carga a los EE. UU. en cantidades mucho mayores.
«El impacto fue una expansión de las importaciones estadounidenses con mucha más carga de la que estábamos acostumbrados a ver», dijo. “Lo que obtuvieron fue un volumen de productos muy inflado que llegó el año pasado.
Pero Seroka y los otros oradores dijeron que los aranceles han generado confusión, interrupción e incertidumbre en la cadena de suministro que tendrá efectos duraderos en la economía.
«La semana pasada, anunciamos una asombrosa caída del 19%» en la carga, junto con un 25% menos de llamadas durante el mes de octubre, dijo Seroka.
La agricultura, dijo Hofmann, «es el epicentro de la guerra arancelaria». Las décadas de construcción de relaciones comerciales, dijo, están en riesgo.
Continúan las conversaciones entre la Administración Trump y China sobre un acuerdo para revertir algunos de los aranceles, pero no se ha alcanzado un acuerdo.
«Las implicaciones son mucho mayores cuando se consideran todos los puertos de Estados Unidos», indicó Seroka.
Se teme a que los efectos que está experimentando el Puerto de Los Ángeles podrían afectar a todos los puertos de entrada de EE. UU.
